En esta ocasión hablaremos de remedios caseros para la diabetes que ayudarán a controlar los niveles de azúcar y regular la glucosa en sangre.
El déficit de insulina, hormona producida por el páncreas y reguladora de la glucosa en sangre, es la causa de la diabetes tipo I, en la que el paciente debe inyectársela diariamente para asegurarse el suministro necesario para la supervivencia. La diabetes tipo II es cuando el cuerpo produce la hormona pero no puede aprovecharla, y es causada básicamente por una mala alimentación.
La diabetes está considerada actualmente como una pandemia mundial, debido a la numerosa población afectada. Causada por trastornos en la producción de insulina o una alimentación pobre en nutrientes y rica en carbohidratos y grasas.
Cuando a una persona le diagnostican diabetes, es importante saber que no es el fin del mundo, que se puede vivir normalmente con ella, y que hay remedios caseros para la diabetes que posibilitan esa vida normal.
Remedios caseros para la diabetes
Lo primero es acudir a un médico para un diagnóstico. Una vez examinado, el paciente debe entender que los cambios en su alimentación y en su estilo de vida son fundamentales para mantener esta enfermedad a raya, cosa que sí se puede: hay millones de diabéticos que lo atestiguan.
¿Funcionan efectivamente los remedios caseros para la diabetes ?
Sí, y muy bien. Sin embargo, al tratarse de una enfermedad delicada cuyo tratamiento no debe descuidarse, lo más conveniente es siempre estar cuidando los alimentos para diabeticos que puedes comer, y en qué momento. También sus indicaciones serán necesarias cuando comiences tus rutinas de ejercicios, pues los que son muy intensos, de mucho esfuerzo, no son recomendables para diabéticos, ya que tienden a subir la tensión arterial y, a veces, empeoran cualquier afección relacionada con la vista.
De modo que, ya hecho el primer paso, ahora si te muestro las soluciones efectivas para la diabetes:
Orégano seco: Entre los remedios caseros para la diabetes más recomendados, tenemos el orégano seco. Este condimento tan utilizado en la cocina, es también uno muy rico en nutrientes, vitaminas y minerales.
- Entre las vitaminas que contiene, y que puede interesarle a una persona diabética, está la K, esencial para los procesos de coagulación sanguínea, pero también en la generación de glóbulos rojos.
- Tiene además alta concentración de vitamina E, y quienes padecen de diabetes tienen un desequilibrio en el metabolismo oxidativo de los carbohidratos y por eso aumenta la concentración de radicales libres que causan daños celulares. Al tomar alimentos ricos en esta vitamina, se está contrarrestando este daño, incrementando la capacidad del organismo de luchar contra los radicales libres.
- Además, por ser un alimento rico en potasio, ayuda a una buena circulación regulando la presión arterial, así como a la regulación de los fluidos corporales y a la prevención de enfermedades artríticas o reumáticas.
- Y lo que más interesa en relación con la diabetes es su alto porcentaje de zinc, pues éste facilita al organismo la asimilación y almacenamiento de la insulina; ayuda a metabolizar las proteínas y es beneficioso para el sistema inmunitario y la cicatrización de heridas, todas cosas primordiales cuando se tiene diabetes. El zinc que contiene el orégano ayuda a combatir la fatiga y contribuye en el transporte de la vitamina A a la retina, que es otro elemento a tomar en cuenta, ya que los diabéticos tienden a sufrir de la vista (especialmente cataratas).
- Entre sus beneficios está la fibra, que ayuda a controlar el peso y a regular la glucemia en sangre, así como a reducir el colesterol y a prevenir el cáncer de colon.
Como ves, el orégano seco es uno de los mejores remedios caseros para la diabetes que se debe incluir en las dietas, dando a las comidas un toque delicioso.
Guanábana
Recientemente se ha descubierto que la guanábana tiene propiedades extraordinarias en el tratamiento de varias enfermedades, entre ellas el cáncer y la diabetes. Su costo es bajo considerando todos los beneficios que aporta al organismo, y de ella se aprovecha desde las hojas (en infusiones) hasta sus semillas (machacadas y pulverizadas), pasando lógicamente por la pulpa, que es deliciosa y aromática.
Con las hojas se puede hacer un té: pones las hojas a hervir en agua durante 10 minutos y te tomas la infusión como un té normal. Su potente acción ayuda a eliminar el exceso de glucosa en la sangre y coadyuva en la normalización del jugo y las enzimas pancreáticas. Si te aplicas insulina, debes consumir 1 o 2 semillas de guanábana, peladas y trituradas, en ayunas por 7 días. Una vez más, consulta a tu médico antes de probar.
Té verde
Otro de los remedios caseros para la diabetes es el té verde. Es un gran antioxidante y quema grasa, por lo tanto ayuda a controlar el peso. Además, ese antioxidante es poderosísimo y se llama EGCG, que permite prevenir las manifestaciones de la diabetes tipo I, evitando y demorando el daño glandular que conlleva esta enfermedad.
Una taza en la mañana, después de desayunar, y otra luego de almorzar, aseguran una buena dosis de este antioxidante.
Las nueces están entre los más recomendados, y se sugiere su consumo regular, pues mejora la resistencia a la insulina y la diabetes; según los resultados de varios estudios, la cantidad de grasas insaturadas que se encuentran en las nueces aumentan la capacidad del organismo humano para utilizar la insulina y regular la glucosa. 28 gramos aproximadamente es lo que cabe en un puño: tómalos al menos cinco veces a la semana, pero hay que tener en cuenta sus calorías: nueces en lugar de otro alimento.
Los cítricos son frutos bajos en azúcar, y ricos en vitamina C y en fibra. Resultan una excelente opción para los diabéticos, que tienden a carecer de suficiente vitamina C. Sus propiedades antioxidantes y quema grasas ayudan a controlar el peso y proveen de más fortaleza al sistema inmunológico.
Otros remedios caseros para la diabetes los constituyen los peces de agua fría, como el salmón, la trucha o la sardina, ya que poseen un alto contenido en aceites esenciales Omega 3, reducen el colesterol que obstruye las arterias y aumentan los niveles de HDL (el colesterol bueno).
Alimentos no aconsejados en los remedios caseros para la diabetes
Como recomendación general, el azúcar debe estar lejos de ti, y las grasas, y el alcohol, y las harinas blancas. Un estudio de un médico norteamericano arrojó datos interesantes con respecto a la relación entre el consumo de trigo (en todas sus formas) y enfermedades como diabetes, hipertensión y otras afecciones cardíacas. Su indicación era dejar de comer trigo.
La eficacia de los remedios caseros para la diabetes depende de otras variables
Cuando hablamos de cambiar los hábitos alimenticios y de estilo de vida, nos referimos precisamente a consumir los mejores alimentos en función de controlar los niveles de azúcar en la sangre, y a promover la producción de insulina.
Igualmente, el control del peso es esencial, ya que la obesidad es una causante directa de la diabetes. Por lo tanto, la grasa se reduce al máximo, así como la ingesta de carbohidratos como harinas refinadas (de trigo, de maíz…) y de dulces.
Elabora junto al nutricionista una dieta rica en nutrientes, come muchos vegetales (bajos en azúcar, evita las remolachas, por ejemplo) y las frutas recomendadas. Ten actividad física moderada: camina, nada, el ejercicio también ayuda a controlar los niveles de azúcar.
Los remedios caseros para la diabetes que aquí te presentamos son tan sólo algunas de las opciones que puedes probar como parte de un tratamiento natural y no por ello menos efectivo. Al contrario, las alternativas caseras y los cambios progresivos en tu estilo de vida, suelen ser aún mejores que los remedios tradicionales.
Actualmente hay muchos estudios que indican que cambiando de alimentación y los hábitos sedentarios, es factible y posible controlar esta enfermedad. Pero hay que ser rigurosos y cuidadosos con lo que se come y cuánto se come, por ello es necesario acudir a un médico especializado y a un nutricionista que oriente el cambio alimentario.